El último grupo de este jueves en el Royal Ascot es –para muchos- la carrera más representativa del meeting y, desde luego, una de las más populares de Inglaterra. En este “Ladies day”, en el que los sombreros volverán a ser la estrella de telediarios tercermundistas, se corre la Gold Cup , ese maratón sobre 4000 metros que sólo pueden disputar los cuatro años en adelante y que está dotado con £225000.

Doce van a ser los aspirantes a esta edición de la Gold Cup, una edición que se presenta muy abierta y a la que no pocos consideran por debajo de la categoría que ha ostentado la prueba en años anteriores. Cierto que faltan los grandes nombres que han dado brillo a esta carrera a lo largo de tantos años de historia –se creaba en 1807-: Sagaro, Ardross, Le Moss, Double Trigger, Westerner y tantos otros, pero quizá exista mayor igualdad que otras veces lo que podría redundar en beneficio de una mayor competitividad. Tan vacío de estrellas lo ha visto alguno que se ha apresurado a reenganchar a su pupilo –AKAREM- por si algo quedara libre en el reparto.

Digamos que los dos favoritos son DISTINCTION y SERGEANT CECIL -ambos con siete años a sus espaldas-, que ya han demostrado su stamina para este recorrido, que han reaparecido convenientemente y a los que conviene la pista rápida. La victoria de cualquiera de ellos supondría una bofetada a la estadística de la prueba que no ha tenido un ganador de siete años desde hace sesenta y seis primaveras. El primero de los citados es un Stoute que terminaba segundo de la pasada edición de esta prueba –en York- y que parece haberse recuperado del bajón de forma que sufriera al término del pasado año, ganando una Listed en su rentrée. Su posible triunfo otorgaría a Stoute la primera Gold Cup desde 1978. SERGEANT CECIL, por su parte, es uno de esos handicappers ingleses que no paran de mejorar y que, por su dureza, consistencia y regularidad, se ganan el favor popular. Cierto que aquí se enfrenta a un Grupo 1 y que esa suele ser otra historia. Pero no cabe olvidarle, pues su segundo puesto en el G2 Yorkshire Cup parecía un aperitivo de algo más.

Al margen de los citados, casi cualquiera de los restantes puede ganar. Nosotros vamos a preferir al visitante galo, REEFSCAPE, un caballo al que Fabre ha preparado específicamente para esta prueba, que cuenta a su favor no solo con la stamina necesaria para un recorrido como este, sino con un cambio de ritmo que puede ser decisivo a la hora de la verdad. Lo único malo es que su eventual victoria supondría tener que aguantar a los franceses diciendo y escribiendo bobadas durante semanas.

No podemos dejar de lado la presencia del Godolphin de guardia, GUADALAJARA, en esta ocasión, hembra. Mucha es la calidad de esta hija de Acatenango y nieta de Unfuwain, que aborda este metraje por vez primera y que reaparece. Sabido es el estado en que se encuentran los azules pero siempre merecen respeto y mucho más en esta carrera que ya han ganado en cuatro ocasiones. Es de dominio público que se trata de una de las pruebas favoritas de Su Alteza Real. Deduzco pues que los profesionales que se ocupan de la cuadra tendrán esto muy presente desde hace semanas y que, por ende, es muy probable que la yegua salga en mejores condiciones que sus compañeros de fatigas. Otra cosa es la distancia. Los Godolphin se han caracterizado por pasar caballos de milla y media a afrontar este compromiso, logrando no pocos éxitos pero también algún fiasco: Marienbad, por ejemplo. En esta ocasión pretenden lo mismo, falta saber el resultado.

Nuestro pronóstico: REEFSCAPE- DISTINCTION