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FR - 15/08/06
GODOLPHIN resucita
Por CFGD La inopinada muerte, nada más comenzar el año, de Maktoum Al Maktoum - principal autoridad política de Dubai, cabeza de la familia Maktoum, exquisito señor al que los ingleses debían dedicar una estatua a la entrada de los hipódromos, en tanto que salvador del turf británico-, parecía haber teñido de negro los colores azul real, siempre tan vistosos. En un año en el que Godolphin se presentaba en la arena turfística europea con un lote más numeroso y prometedor que nunca, la negra sombra de un descomunal fracaso se cernía sobre sus efectivos, traducida en grotescas actuaciones de los que supuestamente competían, que no eran muchos y que, durante semanas, llegarían incluso a ser ninguno, a la vista de los resultados y del conocido amor propio del Boss, el Sheikh Mohammed. Los de Bin Suroor daban el do de pecho adjudicándose el G1 Dubai World Cup con Electrocutionist a finales de marzo y prou. Habrían de esperar a las 16´25 del 13 de agosto para lograr su primer Grupo 1 europeo en un Jacques Le Marois que viene siendo carrera propicia para los de Dubai –cuatro victorias en las últimas ocho ediciones-, con LIBRETTIST. Un Grupo 1 que, en cinco minutos pasaría a incrementarse con el logrado por Cherry Mix en Colonia, al adjudicarse en un canter un premio de nombre perfectamente impronunciable para quién esto narra, el Rheinland-Pokal der Sparkasse KolnBonn. Ahí es nada.
Hemos seguido puntualmente la trayectoria de LIBRETTIST en lo que va de temporada y nada nos ha extrañado un triunfo que ni la brutal chaparrada caída en Deauville en las horas precedentes a la prueba -que dejaba el terreno muy pesado-, ni la tenaz oposición del excelente MANDURO o de la Stoute PEERESS, podían impedir. Tras 596 días ausente de la competición –laminada toda la temporada clásica por una lesión-, LIBRETTIST volvía a la pista en junio, en una prueba de condición de Clase 2, sobre la milla y terreno bueno a firme, que se disputaba en Nottingham. Cuál no sería la debacle de los Godolphin en aquel momento que, ni en una carrerita como esa y montado por Dettori, partía con la etiqueta de favorito, pese a lo cual, se daba un soberano garbeo de punta a punta, augurando su galope un futuro más acorde con su pedigree y procedencia. Acomete casi un mes más tarde un compromiso más serio, una Listed sobre 1700 metros, con terreno bueno a firme, en otro hipódromo de escasa relevancia, Windsor, volviendo a ganar cómodamente a un lote corto pero de nivel aceptable. Con ese bagaje, se acerca tres semanas después a Maisons-Laffitte para disputar el G3 P.Messidor, sobre la milla en línea recta y con terreno bueno, carrera en la que tampoco partía favorito y que habría de servir a sus responsables de indicio –dado el trazado y la más que seria oposición- para conocer si podía ser aspirante al G1 Jacques Le Marois y que se adjudicaba de punta a punta, evidenciando que no había utilizado más que una pequeña parte de sus reservas. En esas condiciones aborda finalmente el objetivo deseado, el Jacques Le Marois, que pasa a engrosar sus victorias en un año en el que permanece imbatido –sólo lo ha sido una vez en su corto historial, en el Dewhurst- y que le aúpa a los primeros lugares de los milers europeos. No cabe sino alabar el trabajo realizado por el team Godolphin con este hijo de Danzig al que creían de mucha calidad y con el que han sido capaces de esperar hasta límites inconcebibles, haciendo gala de una paciencia en ellos paradigmática –no es la primera vez que “resucitan” así a un caballo, ni será la última-, paciencia que no resulta aplicable a otros propietarios, por obvias razones de diferencias en el poder adquisitivo de unos y otros.
Pese a que las condiciones de peso podían indicar lo contrario –partía aquí medio kilo peor que el Fabre MANDURO al que montaba Peslier- y a la ignorancia del efecto que sobre él podría tener un piso convertido en un barrizal, LIBRETTIST salía esta vez favorito. Conducida la carrera por KENDARGENT primero y por el italiano RAMONI después, LIBRETTIST galopaba al acecho, cerca, al tiempo que la gran promesa francesa, STORMY RIVER, acompañaba a SPECIAL KALDOUN en retaguardia. A falta de 200 metros, cede el conductor y es Dettori el que acompaña a su montura hasta tomar la cabeza, resistiendo sin el menor agobio los postreros ataques de MANDURO por el exterior y PEERESS, más hacia dentro, a los que bate por un cuello y una cabeza, diferencias que no deben mover a engaño para carreras posteriores porque el ganador daba la impresión de tener aún mucho dentro. MANDURO vuelve a hacerlo muy bien -evidenciando que probablemente no es la milla su mejor distancia- mientras que PEERESS vuelve a ser la que ganaba el Lockinge Stakes, dejando en el olvido sus carreras posteriores. STORMY RIVER no puede con los viejos pero deja clara su calidad y que quizá un descanso no estaría de más, a la vista de una temporada muy exigente en la que no hay nada que reprocharle, desde luego. AD VALOREM –con Spencer encima, cosas veredes- da por un momento la impresión de ser capaz de luchar por la victoria pero se ve atrapado en un terreno que sencillamente odia, quedando relegado a un quinto puesto que quizá en diferentes circunstancias mejoraría pero que, de alguna manera, sirve de revancha ante la benévola actuación de los comisarios ingleses con ocasión de un Queen Anne Stakes que nunca debía haber subido a su palmares.
Por Danzig y Myterial, por Alleged, medio hermano de Dubai Destination –ganador del G1 Queen Anne Stakes-, LIBRETTIST pertenece a una familia en la que –entre otros nombres ilustres- podemos encontrar los de Red Ransom, La Cucaracha, Grease, Julio Mariner, Hishi Akebono, Agnes World y las clásicas en las antípodas, Riverina Charm y Special Harmony. Desconocen aún sus responsables el futuro programa del hijo de Danzig aunque los rumores apuntan a la Breeders Cup, sin que se descarte alguna posible incursión en pruebas de mayor distancia que, en palabras de Dettori, no debería superar los dos kilómetros.
Como ni desgracias ni beneficios acontecen de forma aislada, no había aún llegado LIBRETTIST al recinto de balanzas cuando, en Colonia, Kerrin Mc Evoy –que, en Alemania no tiene rival: cuatro Grupos 1 montados y tres victoriosos-, sobre un CHERRY MIX que ya en el King George apuntaba recuperación suficiente como para ganar una prueba de ese tipo, se adjudicaba en un canter el G1 reseñado más arriba, dando la impresión de que está en condiciones para volver a triunfar en su próxima salida que, muy posiblemente, fuera el G1 GP de Baden.
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